Buenos días ESO del 13 al 17 de octubre
Lunes, 13 de octubre
Martes, 14 de octubre
MISIONEROS DE ESPERANZA: PROYECTOS PARA QUE NIÑOS Y NIÑAS SEAN IGUALES
Hay que promover proyectos que aseguren que niños y niñas tengan las mismas oportunidades, especialmente en contextos donde la desigualdad de género puede ser una barrera significativa para el desarrollo pleno. Su enfoque no solo busca la equidad en el presente, sino que sienta las bases para un futuro más justo y equitativo.
Las Obras Misionales Pontificias (OMP), a través de Infancia Misionera, tienen una presencia muy fuerte y un impacto considerable en África. De hecho, África es un continente prioritario y el principal receptor de las ayudas de Infancia Misionera a nivel mundial.
La labor de Infancia Misionera en África se centra en proporcionar apoyo fundamental a niños y niñas en las "diócesis de misión", es decir, aquellas con menos recursos y donde la Iglesia está en crecimiento. Sus proyectos abarcan diversas áreas vitales:
1. Educación y Formación Cristiana
2. Salud y Bienestar
3. Promoción de la Igualdad entre Niños y Niñas: Aunque no siempre se detalla como un proyecto de "género" explícito en cada ayuda individual, la igualdad de oportunidades es un principio fundamental que guía la distribución de los fondos y la implementación de los proyectos de Infancia Misionera:
Acceso equitativo a la educación: Al financiar escuelas y becas, se busca que tanto niños como niñas tengan la misma oportunidad de aprender y desarrollarse. En muchas culturas africanas, la educación de las niñas ha sido históricamente relegada, por lo que el apoyo a escuelas beneficia directamente su acceso y permanencia.
Protección contra la violencia y la explotación: Al rescatar a niños de situaciones de abuso o explotación (como el trabajo infantil o el matrimonio temprano en el caso de las niñas), Infancia Misionera contribuye a la protección equitativa de los derechos de todos los menores.
Fomento de valores de solidaridad: Al enseñar a los niños de todo el mundo a "ayudar a los niños" en África (y otros continentes), se promueven valores de generosidad y respeto mutuo, que son esenciales para construir una sociedad más igualitaria.
África es el continente que recibe la mayor parte de las ayudas de Infancia Misionera. Por ejemplo, en 2022, el 60.2% (7.3 millones de euros) de los fondos mundiales se destinaron a África, apoyando una vasta red de proyectos. En 2025, África sigue siendo el "corazón de la Infancia Misionera", con un continuo apoyo a miles de proyectos que benefician a millones de niños y niñas.
PALABRA DE DIOS: Génesis 1, 27
«Y Dios creó al ser humano a su imagen; lo creó a imagen de Dios. Hombre y mujer los creó».
VÍDEO: https://youtu.be/g61WpqbJsG8?si=hhvV6ldflB4BmztE
María, Auxiliadora de los cristianos, ruega por nosotros
Miércoles, 15 de octubre
MISIONEROS DE ESPERANZA:
IGLESIAS PARA HABLAR DE UN DIOS BUENO
Hoy queremos comenzar la jornada con una invitación especial: ser misioneros de esperanza, en un mundo que a veces parece perdido, herido o sin rumbo. Nosotros, como comunidad creyente, estamos llamados a ser Iglesia viva, donde cada persona pueda descubrir a un Dios bueno, cercano y que nunca falla.
La Iglesia no es solo un edificio, sino una comunidad de personas que viven el Evangelio con alegría y compromiso. Y tú, yo, nosotros... somos esa Iglesia.
PALABRA DE DIOS: Romanos 10, 14-15
«¿Y cómo invocarán a aquel en quien no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído hablar? ¿Y cómo oirán si no hay quien lo anuncie? (…) ¡Qué hermosos son los pies de los que anuncian la Buena Noticia!».
VÍDEO
¿Qué es ser Iglesia? | Proyecto “Viviendo mi fe” (duración: 3 min)
Este breve vídeo nos ayuda a entender que la Iglesia no es solo un lugar al que vamos, sino algo que somos, un cuerpo vivo que actúa en el mundo.
REFLEXIÓN
Ser misioneros de esperanza es hablar de un Dios que ama, perdona, acompaña y confía. A veces pensamos que para hablar de Dios hay que ser perfecto, saber mucho o tener respuestas para todo. Pero lo más importante es mostrar con nuestra vida que Dios es bueno.
Piensa un momento:
¿Cómo puedo ser “Iglesia” en mi grupo de amigos, en clase, en casa?
¿Qué imagen de Dios transmito con mi forma de ser?
¿Quién me ha hablado a mí de un Dios bueno? ¿Cómo puedo hacer yo lo mismo por otros?
MISIONEROS DE ESPERANZA:
CENTROS DE SALUD PARA CURAR
INTRODUCCIÓN
Hoy queremos tener una imagen en la cabeza: la Iglesia como un centro de salud espiritual y humano, un lugar donde se cura el corazón, se acompaña en el dolor, se abraza al que sufre y se ofrece esperanza a quienes están heridos por la vida.
La Iglesia, y nosotros como parte de ella, estamos llamados a ser misioneros de esperanza que curan con palabras, gestos, silencios, escucha y cariño.
PALABRA DE DIOS: Lucas 4, 40
«Al ponerse el sol, todos los que tenían enfermos con diversas dolencias se los llevaban; y él, poniendo las manos sobre cada uno de ellos, los sanaba».
Jesús no se aleja del sufrimiento humano. Al contrario, se acerca a los enfermos, los toca, los escucha, los sana. Nos enseña que curar es también amar, consolar, estar presentes. Ser Iglesia es seguir haciendo eso hoy.
VÍDEO: Curas del alma: el hospital del Papa Francisco | Vatican News (duración: 3:03 min.)
Este vídeo breve nos muestra cómo el Papa Francisco habla de la Iglesia como un "hospital de campaña" donde se acoge, se acompaña y se sana. Una visión llena de esperanza y misericordia.
REFLEXIÓN
¿Cuántas veces vemos a nuestro alrededor personas que, aunque no tengan heridas físicas, están rotas por dentro? Miedo, ansiedad, tristeza, soledad…
Y otras veces, somos nosotros los que necesitamos ser curados.
En esos momentos, la Iglesia, la comunidad, los amigos verdaderos, los educadores comprometidos son como pequeños centros de salud: nos escuchan, nos comprenden, nos levantan.
Tú también puedes ser parte de ese “hospital”:
¿Cómo reaccionas cuando alguien a tu lado sufre?
¿Eres de los que cura con palabras… o de los que hiere con comentarios?
¿Te dejas ayudar cuando te sientes mal o te lo guardas todo?
Ser misionero de esperanza es también saber curar con amor y dejarse curar con humildad.
Viernes, 17 de octubre
MISIONEROS DE ESPERANZA: ESFUERZOS PARA QUE TODOS TENGAN LAS MISMAS OPORTUNIDADES
Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza
Hoy no es un día cualquiera. Se celebra el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, una jornada que nos invita a mirar más allá de nuestras rutinas y preguntarnos:
¿Vivimos en un mundo justo? ¿Todos tienen las mismas oportunidades?
La respuesta, por desgracia, es clara: no.
Hay millones de personas que luchan cada día por tener lo más básico: alimento, educación, salud, seguridad, una vida digna. Y lo más doloroso es que muchas veces esto no ocurre por falta de recursos, sino por falta de justicia, de compromiso, de solidaridad.
Como misioneros de esperanza, estamos llamados a romper esta desigualdad, a tender la mano, a crear un mundo donde nadie quede atrás.
PALABRA DE DIOS: Isaías 58, 6-7
«¿No será más bien este el ayuno que yo escogí: soltar las cadenas de la injusticia, desatar las correas del yugo, dejar libres a los oprimidos y romper toda atadura?
¿No es acaso compartir tu pan con el hambriento y dar refugio a los pobres sin techo,
vestir al desnudo y no desentenderte de tu prójimo?»
Este texto nos recuerda que lo que Dios quiere no son palabras bonitas, sino acciones concretas de justicia y fraternidad. Y que no se puede ser cristiano si no se lucha por la dignidad de todos.
VÍDEO: “¿Qué es la pobreza?” – Oxfam Intermón (duración: 2:29 min)
Este vídeo breve, pero impactante, muestra que la pobreza no es solo falta de dinero, sino la consecuencia de un sistema desigual que podemos y debemos cambiar.
REFLEXIÓN
La pobreza no es lejana. Puede estar más cerca de lo que pensamos: en nuestro barrio, en nuestra ciudad, en nuestras aulas.
A veces está en forma de falta de recursos, pero otras veces aparece como falta de oportunidades, de acceso, de escucha, de comprensión.
Y en este contexto, ¿qué significa ser misionero de esperanza?
Es ser alguien que no se conforma con lo que hay.
Es ser alguien que busca que todos puedan llegar a lo mismo, aunque no partan desde el mismo sitio.
Es luchar por un mundo más justo, más humano, más evangélico.
Pregúntate hoy:
¿Soy consciente de los privilegios que tengo?
¿Qué puedo hacer para que alguien que lo tiene más difícil tenga más oportunidades?
¿Mi actitud construye igualdad… o justifica la indiferencia?
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